Friday, March 25, 2011
"IMAGINE" Las redes sociales en 1969
Imagínate que hubiese podido ser si en 1969 hubiese habido Facebook y Twitter y teléfonos móviles en España. Mientras Fraga gritaba aquello de que “…la calle es mía”, me pregunto si hubiese sido posible de hacer la calle nuestra como han hecho en los países árabes este invierno.
Seguro que se pueden enumerar muchas y notables diferencias en la situación más allá de la existencia de una dictadura opresiva y un deseo de liberación de las gentes.
Una no pequeña era la presente memoria de una tremenda guerra civil como preludio de la dictadura y la no menos tremenda represión que la siguió, con un enorme peso disuasorio contra la violencia política. Entonces aún no habían visto la luz los movimientos violentos (terroristas) del independentismo vasco o el anarquismo de extrema izquierda como el FRAP o los GRAPO.
Y otra gran diferencia era sin duda el contexto internacional, entonces en plena Guerra Fría, con los bloques absolutamente enfrentados y distanciados en varios escenarios colaterales como Vietnam, Cuba o Indonesia.
Otra diferencia puede ser la demográfica. La población española distaba mucho de la población mayoritariamente joven de los países árabes en la actualidad. Precisamente entonces comenzaba el “baby-boom” de los años setenta cuya repercusión demográfica no se produjo hasta veinte años después.
Y una que se me antoja no sólo fundamental, sino también instrumental, es la que puede representar el contexto religioso. No me puedo imaginar a los jóvenes españoles reuniéndose para manifestarse después de la misa de 12 del domingo como hace los árabes después de la oración de los viernes. En primer lugar porque ya para entonces la asistencia a las celebraciones religiosas había perdido vigencia en un país confesional pero no practicante. Y luego porque, aunque hubiese algunos clérigos que se hallasen próximos a los movimientos obreros, la jerarquía eclesiástica permanecía muy integrada—integrista—en el régimen.
La existencia de las redes sociales parece haber sido el gran determinante de los movimientos revolucionarios en los países árabes. La modalidad “flash mob” permite una cierta impunidad en las convocatorias. Todos recordamos el coste que tenía distribuir octavillas, calificado como delito de “propaganda ilegal” y que comportaba condenas interminables que sufrieron muchos luchadores por la libertad.
Si el saldo de la transición fueron unas docenas de muertos, es cierto que muchos fueron asesinatos concretos y no masacres indiscriminadas de las multitudes manifestándose. A cambio el oprobio de ver morir al dictador en la cama y demorar un decenio la consolidación de la democracia en lo que se ha conocido como “la transición”, en algunos extremos aún no concluida.
En 1969 soplaban los vientos del mayo francés del 68 que realmente cambiaron el mundo al simultanearse con la crisis de los magnicidios norteamericanos de Martin Luther King y Robert Kennedy y las revueltas estudiantiles en Chicago y otras ciudades en contra de la guerra de Vietnam. En España se impuso el estado de excepción y el régimen de la dictadura franquista inició su gradual y desgraciado declive.
Si hubiesen existido las redes sociales nuestros comportamientos hubiesen sido otros, y la repercusión internacional que permite la Internet hubiese marcado notables diferencias.
Ahora sólo queda poner esto en un blog.
Saturday, March 12, 2011
North Afrika dictators and what to do with them
The democracies’ handling of dictators has been always erratic. Despite the knowledge of atrocities against their opponents within their countries, the democracies usually tended to try to appease the monsters rather than fighting them. No question that all dictators are monsters, by definition. There is not such a thing as a “soft” dictatorship. In Spain they coined the word “dictablanda” as opposed to “dictadura” playing with the meaning of “dura”, hard, way back in the early 20th Century when an obscure general Berenguer took over the Primo de Rivera dictatorship for a short while. The ailing (alcoholic) and widely criticized Primo lost the king’s confidence and exiled himself to Paris. Catalans knew there was nothing “soft” as the Primo viceroy in Catalonia implanted the “ley de fugas”, a law allowing police and army to shoot to kill anyone fleeing, no questions asked. That was an easy way of getting rid of opponents.
Those years Mussolini and Hitler, Poland’s Józef Piłsudski, reached power they did not release but by force. Even worse Josif Stalin took over what was meant to be the “dictatorship of the proletariat”. Those plus Spain’s Franco and Portugal’s Oliveira Salazar moulded politics in Europe for the first half of the century and were responsible of more than 100 million dead. But as the same Stalin said, when the victims reach millions the count looses its meaning.
In front of those dictators the European (and American) democracies did not react until they were directly attacked.
In “The king’s speech” movie you may hear the common thought those days amongst the British upper crust that the real problem were the Bolsheviks and that Hitler will take care of them. He did indeed got rid of the German Communists by killing them outright… and then he kept on killing everyone else that opposed him along with just a few million of innocent bystanders…
Gaddafi is proving he was a tougher nut to crack (or his children are) and the EU countries keep on procrastinating as they did with the Serbians.
The no-fly zone can only be enforced with the VI Fleet power, even though it would take just 8 hours for the French Air force (the closest) to destroy Gaddafi’s airplanes.
The problem is there is no a political plan for the after-Gaddafi situation, so the EU countries will keep on dragging their feet to see if somebody else (the US) takes the lead.
Will we see the Marine Corps singing again “From the halls of Montezuma/ to the shores of Tripoli…” on the sands of Tripoli?
By now the Pentagon must have more than one HK-11 satellite in orbit over Libya and a couple of geostationary birds and must know even where Gaddafi goes to pee.
But there are still too much away from taking a definite decision to step in Libya.
Meanwhile the dreadful thought that that murderous clown of Gaddafi might get away with his own people repression despite international condemns, overflies the situation.